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ESCLAVIZADOS

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En 1641 el artista y mercader Zacharias Wagner registró la vida cotidiana de Recife. En aquel momento esta conocida ciudad brasileña formaba parte de las colonias americanas de la República de Holanda, pero hasta poco antes había pertenecido a Portugal. Desde el siglo anterior los portugueses habían dedicado aquellas tierras a la plantación de azúcar. Inicialmente utilizaron a indígenas americanos como mano de obra, pero su escasez y la dureza de los trabajos propiciaron su sustitución por africanos. Se trata de uno de los puntos de arranque del conocido como “comercio triangular”, una ruta que conectaba las orillas del océano Atlántico a través del intercambio comercial entre Europa, África y América. Europa desarrolló su potencial económico (industrialización) gracias al suministro de materias primas procedentes de América, que eran extraídas gracias al trabajo esclavos africanos.

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De este modo, el desarrollo industrial europeo queda vinculado al tráfico de negros, uno de los episodios más crueles de la historia. Miles de africanos fueron secuestrados para ser vendidos para cubrir la demanda americana de mano de obra. Desde varios puntos del Golfo de Guinea zarpaban barcos repletos de esclavos rumbo a América. En el siglo XVII los principales destinos fueron Brasil y el Caribe. En el siglo XVIII la demanda caribeña aumentará debido al desarrollo de plantaciones de algodón y azúcar principalmente en las colonias inglesas, francesas y españolas. Solo en estos dos siglos se estima que 11 millones de africanos cruzaron el Atlántico víctimas de la esclavitud. Las condiciones en las que lo hacían eran deplorables. Apilados, engrillados, escasamente alimentados e higienizados, la tasa de mortalidad podía llegar al 50%. Una vez en tierra eran examinados, tasados y vendidos en subastas.

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Todo el proceso suponía la deshumanización de los esclavizados, a quienes se les denominaba “piezas”. El auge del tráfico de negros coincidió con el desarrollo de la Ilustración. Muchos pensadores ilustrados justificaron la esclavitud con argumentos racistas. Montesquieu llegó a decir: “Resulta impensable que Dios, que es un ser muy sabio, haya puesto un alma, y sobre todo un alma buena, en un cuerpo enteramente negro.”

Fuentes:

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Imagen

Zacharias Wagenaer/Wagner, Thierbuch, 1637-1644.

Disponible en Wikimedia Commons

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Para saber más:

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Lecturas

-Herbert S.K. y Vinson, B. (2013). Historia mínima de la esclavitud en América y el Caribe. México: El Colegio de México

- Manuel F. Fernández Chávez, M.F. y Pérez García, R.M. (2021). Tratas atlánticas y esclavitudes en América. Siglos XVI-XIX. Sevilla: Universidad de Sevilla.

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Documentales

Cachita. La esclavitud borrada, una creación de Álvaro Begines (2020)

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Webs

Enslaved. Peoples of the Historical Slave Trade

Slave Voyages

Documenta Palmares. Um instrumento de pesquisa

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